Riccardo Mezzanotte es inspector de la Policía de la Estación Central de Milán. Tiene un pasado tormentoso y una propensión innata a meterse en problemas que le lleva a investigar un caso que no parece interesar a nadie: alguien está esparciendo por la estación los cadáveres de animales mutilados. Laura Cordero tiene veinte años y esconde un secreto. Ella también está buscando a alguien: dos niños a los que ha visto varias veces deambulando solos por la zona. Será en los laberintos subterráneos de la estación, donde ni la policía se atreve a aventurarse, donde Riccardo y Laura encontrarán la resolución a los misterios que tratan de resolver.
«El thriller italiano cambia de piel cada 20 años. En 1980 fue con El nombre de la rosa, en 2002 con Yo mato. Ahora es el turno de La estación». Antonio d’Orrico, Il Corriere della Sera.